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Categoría: Cuentos
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Aportaciones desde Argentina de un descendiente de un canario de Tamaraceite:

Hace ya unos meses me llegó un correo desde Rosario, Argentina, de D. Normando Jiménez. Mi correo se lo había dado D. Domingo Guerra, de Tenoya. Me comentaba sobre el tema de la publicación de mi libro sobre la Historia de San Lorenzo de Tamaraceite y también me pedía, si no me era molestia, que mantuviéramos un contacto a través del correo electrónico, invitación que acepté muy gustoso. Lo curioso es que este hombre nunca ha pisado Canarias y todo lo que sabe, que es muchísimo, se lo transmitió su abuelo, emigrante desde Tamaraceite a Argentina.

Con referencia a su abuelo nos comenta que nació en Tamaraceite, Municipio de San Lorenzo, en el año 1869. Se llamaba D. Juan Jiménez Martel, y estaba emparentado con apellidos canarios de la zona de San Lorenzo como los Rivero, Del Pino y Suárez. En Argentina se le conoció como D. Juan El Canario. Éste era un hombre de pocas palabras pero de una gran profundidad de pensamiento y para muestra baste con la respuesta que le dio a su hijo Alfonso, futuro padre de Normando, cuando le dijo que quería casarse con una buena mujer, suiza lombarda, y se lleno de elogios hacía su futura pareja. Don Juan El Canario le contestó: “Con la cuchara que tomes, con ella comes”, evidentemente una frase muy canaria, muy de nuestro refranero.

Para nuestro contacto, D. Normando Jiménez, tuvo que ser muy fuerte la relación con su abuelo canario y como muestra fehaciente de ello es que hasta hoy ha guardado en su mente las historias que D. Juan El Canario le contaba, con una riqueza de datos que parece como si nuestro interlocutor conociera nuestra Isla, nuestro Municipio de San Lorenzo, de primera mano. Nos habla con una gran soltura de topónimos y costumbres, haciendo que nos emocionemos con la lectura de unos cuentos que el ha titulado “Cuentos Canarios”. Al leer éstos le pedí permiso a su autor para publicarlos pues creí que sería muy interesante que llegaran a todos y todas los canarios y canarias de ahora, entre otras razones para que luchemos por conservar nuestro patrimonio cultural, histórico, paisajístico, natural y antropológico. Me dijo que hiciera lo que estimara conveniente y también me decía “corrija los posibles errores” pero he preferido que lleguen a ustedes tal y como él los escribió y yo tuve el placer de leer y emocionarme.

El primero de los cuentos que recibí se titula “Adiós machango” y el segundo “D. Juan El Canario y su camello”. Es impresionante la dedicatoria final de este segundo cuento “Con todo mi amor hacía Tamaraceite”. Espero y deseo que estas historias, estos cuentos canarios, sean de vuestro agrado.

Juan Francisco Santana Domínguez